Existen cuatro enfermedades cítricas en los Estados Unidos. Estas incluyen Huanglongbing (conocida como el enverdecimiento de los cítricos, enfermedad del dragón amarillo o HLB), cancros de los cítricos, mancha negra de los cítricos y sarna de la naranja dulce. Hoy en día, por lo menos una de estas enfermedades amenaza cada acre de cítricos en los Estados Unidos.
Llamada así por producir frutas verdes y deformes, el enverdecimiento de los cítricos ha causado la muerte de millones de plantas cítricas en el sureste de Estados Unidos y está amenazando con extenderse por todo el país. Vea todas las zonas afectadas.
El enverdecimiento de los cítricos es una de las enfermedades más graves de las plantas cítricas en el mundo. También es conocida como Huanglongbing (HLB) o enfermedad del dragón amarillo. Una vez que un árbol se infecta, no tiene cura. Aunque la enfermedad no representa una amenaza para los seres humanos o los animales, ya ha destruido millones de hectáreas de cultivos de cítricos en EE.UU. y el extranjero.
La enfermedad del enverdecimiento de los cítricos se detectó por primera vez en Asia a finales del siglo XIX, y ya ha causado estragos en Asia, África, la Península Arábiga y Brasil.
La cancrosis o cancro de los cítricos es una enfermedad bacteriana de los cítricos que produce una caída prematura de hojas y frutas. Los síntomas principales son lesiones en las hojas, los tallos y las frutas de los árboles cítricos.
Aunque no es perjudicial para el ser humano, la enfermedad afecta la salud y las posibilidades de comercialización de la fruta infectada. La cancrosis hace que la salud y la producción de fruta del árbol cítrico empeoren continuamente hasta que, finalmente, el árbol ya no produce fruto alguno. Afecta a todo tipo de cítricos y es muy contagiosa. La cancrosis de los cítricos se puede propagar rápidamente a través de:
Aunque se cree que la cancrosis se originó en el sudeste de Asia, la enfermedad se detectó por primera vez en 1910 en Estados Unidos. La enfermedad se descubrió en Florida, y se extendió hasta los estados del Golfo y Carolina del Sur antes de ser erradicada. En 1986 la cancrosis se detectó de nuevo en la costa del Golfo de Florida y se declaró otra vez erradicada en 1994.
El brote más reciente de la enfermedad apareció en 1995 en Florida y, tras 10 años de arduos trabajos para su erradicación, el USDA declaró finalmente que dicha erradicación ya no era posible.
La mancha negra de los cítricos, o Guignardia citricarpa, es una enfermedad fúngica caracterizada por manchas y lesiones oscuras y moteadas sobre la cáscara de la fruta. Esta enfermedad cítrica, una de las más devastadoras del mundo entre las causadas por hongos, provoca la caída prematura de la fruta, reduce el rendimiento de los cultivos y hace que las frutas, malogradas por las intensas manchas, sean inadecuadas para la venta.
Aunque todos los cítricos comerciales enfrentan el riesgo de contraer mancha negra, el limón y las variedades de cítricos de maduración tardía, como la naranja tipo “Valencia”, son los más vulnerables. La enfermedad se transmite a través de esporas liberadas por hojas de cítricos caídas y en fase de descomposición.
La sarna de la naranja dulce es una enfermedad fúngica que provoca lesiones antiestéticas similares a una costra en la cáscara de las frutas y, en menor medida, en las hojas y las ramas pequeñas. El daño producido es superficial y no afecta el gusto ni la calidad interna de la fruta. La lluvia y la irrigación dispersan fácilmente el hongo, que puede ser transmitido a las plantas de vivero infectadas, como las frutas y plantas cítricas para decoración. Los insectos también pueden propagar el hongo ya que transportan esporas fúngicas en el cuerpo.
Es más probable que la fruta infectada tenga una caída prematura y las lesiones similares a una costra disminuyen el valor de la fruta en el mercado de productos frescos. Además, la enfermedad puede atrofiar las plántulas cítricas jóvenes. Varios países de América del Sur y Oceanía han informado casos de esta enfermedad. En los Estados Unidos, se confirmó esta enfermedad por primera vez en Texas en junio de 2010